Marito o Varguitas que vive con sus abuelos porque sus padres están fuera del país, trabaja en la radio y empieza a orientarse en el campo de la literatura. Es en este tiempo que comienza la relación con Julia y con quien termina casándose a pesar de la oposición de su familia.

 Por otro lado, en la radio conoce a su primera inspiración verdadera: Pedro Camacho que es un autor boliviano que compone guíones de radionovela y cuyas historias se entrelazan con las aventuras del protagonista.

La noble pasión amorosa entre la tía Julia y el aprendiz de novelista, que la sociedad limeña de los años cincuenta trata por todos los medios de impedir, se combina y contrasta con las narraciones truculentas del folletinista de las ondas.

 El contrapunto de una encendida pasión con aires shakesperianos y su correlato melodramático y la inesperada confluencia del devoto de la alta literatura y el escribidor rastrero son algunas claves de esta obra de Mario Vargas Llosa.